En la Tintorería y Lavandería Everest, Francis Fernández lleva 35 años al frente de la empresa y cada vez con más ganas, ganas de innovar y de seguir en el candelero por muchos años en los fogones.
En gastronomía hay muchas modas y una de las últimas modas ha sido la desaparición del mantel. Después de 18 años trabajando para la hostelería ¿cómo lo habéis vivido? ¿Creéis que esa moda ya está pasando?
Realmente esa moda no nos repercutió mucho porque llevamos desde el año 2000 trabajando con la hostelería y en realidad hay muchos que no han puesto mantel pero, hay muchos otros que se han ido incorporando a la buena mesa y al buen mantel porque ahora realmente si te fijas, voy hablar de las sidrerías que ya son como restaurantes y, prácticamente, no hay ninguna sidrería que te ponga papel, lo que hace 10 años era impensable en las sidrerías y ahora ya casi ni en merenderos.
Si nos fijamos en merenderos muchos ya ponen mantel de tela, porque el papel mucha gente, por el tema ecológico no es sostenible y no es reciclable entonces mucha gente tiene esa mentalidad de que el papel… lo quieren volver a poner, entonces la tela. O la higiene que te presta una tela no te la ofrece un papel, evidentemente.
A veces se ponen esos manteles individuales de mimbre que pensamos: ¿ahí tiene que quedar toda la porquería por mucho que frotes?
No ofrece la misma higiene una tela que un sitio donde siempre te queda algo, porque pones los cubiertos, o pones el pan, o pones la mano. Aunque luego, por supuesto, los hosteleros lo limpian bien, lo desinfectan pero siempre te va quedar algún resto que nunca te va a quedar en un mantel de tela porque nosotros lo lavamos con ozono con oxígeno, eso es un desinfectante natural.
¿Ya no se trabaja como se hacía hace años?
A parte de lavar bien que siempre se lavó bien ahora tenemos oxígenos activos, tenemos hipoclorato y luego también le damos ozono. Lo lavamos con ozono, que es un desinfectante. En el proceso de lavado entra para la desinfección porque realmente estás en contacto con la alimentación, más higiénico no puede ser, estás cogiendo cubiertos, un tenedor que se lo metió otra persona en la boca y lo dejan en el mantel, bien nosotros no lavamos la cubertería, está claro pero cuando lo dejan en el mantel ahí puede venir cualquier sustancia.
¿Cómo lo vive un hostelero? ¿Cómo un coste o como un servicio y un valor añadido?
Está claro que el que hace poner mantel en el restaurante es un coste, porque no lo regalamos. Pero está claro que es un valor añadido como lo miran en su materia prima, con los aceites, con las verduras, con la carne, con el pescado, está claro que nadie se lo regala. Ellos lo meten en el coste para subir la calidad o la buena imagen de un restaurante. Eso está claro que cuando tú vas a un restaurante nunca ves las cocinas, no ves lo que hay allí. ¿Con qué te quedas? Pues con lo que hay afuera, el comedor, la vajilla, el mantel, lo que tienes a mano y lo que te hace que te hagas una idea de cómo puede ser la trastienda, porque la trastienda tú no la ves.
El que pone el mantel y lo cuida da pistas de que igual cuida también otras cosas
Bueno está claro que el que pone mantel y pone servilleta el coste añadido que lleva a su menú del día o a su cubierto, porque no lo regalamos eso es un coste que es significativo del plus de calidad e higiene que quiere dar a sus clientes. Claro, eso es el hostelero el que valora, pierde margen pero igual lo gana en dar más comidas, en dar más confianza al cliente cuando a veces vas a sitios y no sabes cómo se come normalmente y controlas, ves un poco y la imagen del local es lo que te puede ayudar, te inclina a entrar o no entrar. Y luego bueno lo escrupuloso que tú seas también.
Hay gente que si no hay mantel no quiere ir a ese restaurante, no sé si eso lo palpáis. Hay un perfil que no admite un restaurante sin mantel.
No me atrevo a decirte, pero lo que está claro que cuando tú entras un comedor sin mantel es como un camarero sin uniforme, yo lo llamo así. Entonces tú la sensación que te puede dar entrar y ver un mantel, por ejemplo a mi al entrar a un restaurante está claro que la primera vista es la que te importa, ¿no? Es como un novio sin corbata, le falta algo. Van bien también pero te suena algo raro que un comedor de estos donde vamos a comer la gente, que hoy en día los menús del día tienen un precio, ya no quiero hablar de la carta que te dejas un dinero y que no tengan un mantel. De hecho la proporción que hay en Asturias es mínima porque hay muy poca gente. Que luego habrá gente que no quiera entrar a un restaurante que no tenga mantel pues si tú lo has palpado y lo has oído no te voy a discutir.
El renting ha llegado a la hostelería ¿se alquilan o se ceden manteles?
Realmente la hostelería ha crecido mucho en el cuidado de las mesas, por eso las tintorerías como Everest suelen llegar a un acuerdo de prestación. Le damos la mantelería que es adecuada para su restaurante y les vamos haciendo las limpiezas con un compromiso diario de entrega en perfecto estado, nueva, limpia e higienizada. La mayoría de los establecimientos ya no compra los manteles, suelen hacer renting. Luego hay restaurantes que quieren tener su mantelería propia, por circunstancias quieren traer su nombre o lo que sea y esos la suelen mandar a limpiar. Pero la mayoría de los bares, las sidrerías se ponen en contacto y nosotros les llevamos los manteles, los llevamos y traemos todos los días.
Después de 35 años seguís abriendo tiendas.
Sí, este año hemos abierto dos tiendas una en febrero en el Natahoyo, en la calle Dos de Mayo y ahora hace quince días volvimos a abrir una en el centro que llevábamos 60 años en el pasadizo de San Agustín y ahora la hemos pasado al Centro Comercial San Agustín a cinco metros enfrente del pasadizo, ahí en primera línea. Hemos abierto Tintorería Everest, hemos abierto también autoservicio como en la calle Dos de Mayo, ahí hicimos la primera unión entre autoservicio, que es lo que está demandando ahora mucha gente, la gente más joven o gente que viven en grupo y no tienen lavadora. Y lo hicimos como experiencia piloto en el Dos de Mayo y ahora en San Agustín hemos abierto Tintorería Everest autoservicio para gente que viene con camisas, pantalones, edredondes, piezas grandes para lavar. Está abierto desde las nueve de la mañana a las nueve de la noche y también tenemos taller de costura, taller de arreglos de ropa.
