Un año más, ya está en marcha la búsqueda del mejor plato de callos de España, en el segundo Concurso Nacional de Callos de Lena, “La Callada por Respuesta”. Así, alrededor de medio centenar de establecimientos hosteleros de toda España participan en este certamen y en las jornadas gastronómicas que lo acompañan.
De este modo, los restaurantes ofrecen un suculento menú que tiene como protagonista innegable este tradicional guiso y que consta de un entrante, callos, postre y bebida, por un precio de entre 20 y 40 euros.
Las jornadas, que arrancarán el próximo 6 de noviembre y se extenderán hasta el próximo 3 de diciembre, permitirán a todos los amantes de este plato probar y disfrutar de las mejores elaboraciones de todo el país, aquellas que se presentan al Concurso Nacional de Callos de Lena.
Desde Asturias a Granada, pasando por Madrid, Barcelona, Salamanca, Valladolid, Burgos o Palencia, todos los aficionados al mundo de la gastronomía encontrarán su espacio en los más de 50 restaurantes que opositan a convertirse en el mejor plato de callos de España y alzarse así con el premio de 1.500 euros. El evento está organizado por el Ayuntamiento de Lena y la empresa de eventos gastronómicos Gustatio y cuenta con el patrocinio de la empresa cárnica asturiana Trasacar, del vino de bodegas Torres Malpastor y de Caja Rural de Asturias.
Además, durante este periodo, un jurado misterioso recorrerá todos los locales participantes para dirimir cuáles de ellos pasan a la gran final, que tendrá lugar el próximo 15 de enero en Pola de Lena (Asturias). En ella, un jurado experto compuesto por reconocidos cocineros, críticos gastronómicos y otros expertos del sector, decidirán el primer, segundo y tercer clasificado, así como la mejor elaboración del concejo asturiano. El ganador absoluto se llevará los 1.500 euros de premio.
Cabe destacar que para este evento se han creado unas redes sociales propias: @lacalladaporesupuesta (Instagram) y “La Callada por Respuesta” (Facebook), con una imagen atrevida, donde los más foodies podrán seguir el día a día de las jornadas, así como conocer de primera mano los menús y elaboraciones de los establecimientos participantes.
Todo ello para poner en valor un plato tan representativo de la cocina tradicional, especialmente en el concejo asturiano de Lena, donde es ya una institución.
