Si te acercas a la playa de la Concha, a ver el Castillo de la Mota o simplemente a disfrutar de un paseo por San Sebastián, enseguida notarás que te entra el hambre. Es como algo natural, porque Donostia huele, y huele muy bien, a cada paso en el casco viejo, en Gros o en cualquier otro rincón. Porque allí, cualquier esquina es susceptible de tener un bar de pinchos, una taberna canalla o una pomposa barra. Estos son los diez locales de pinchos donde más disfrutamos en nuestras visitas a San Sebastián:
-La Cuchara de San Telmo (31 de agosto, 28): quizás es el único lugar al que siempre voy en todas las visitas a la ciudad. ¿Porqué? Por su cocina honesta y sabrosa. Me motivan por igual sus arroces que sus platos carnívoros y el resto de platillos que te ponen, como el fantástico foie.
–A Fuego Negro (31 de agosto, 31): es el gran triunfador de los concursos, mentes inquietas que no paran de crear y desarrollar nuevos conceptos de minicocina.
-Borda Berri (Fermín Calbetón, 12): hecho al momento, esa es su gran virtud. En este establecimiento los pinchos no te entran por la vista, porque tan solo verás una pizarra con sus especialidades en minicocina, desde arroz con chipirón, risotto de Idiazabal, oreja de cerdo crujiente o ravioli con molleja y puerro.
–Vergara (Mayor, 21): es el feudo de los cocineros, donde se reúnen los estrellas michelín en los congresos, un lugar por el que no pasa el
tiempo.
– Gandarias (31 de agosto, 23): es un lugar tradicional con pinchos tradicionales, pero tiene mucho encanto, y le aportan mucho valor
añadido los vinos que chatean, de mucho nivel. Prueba la brocheta de chipirón o el crepe de bacalao.
– Tamboril (Pescadería, 2): si hay que relacionar este bar con un producto culinario sin duda el rey de la casa sería el champiñón. No te pierdas tampoco su sublime tempura de anchoa o la tartaleta de salpicón.
-Bar Antonio (Bergara, 3): Me pirran sus gambas a la gabardina, sus calabacines rellenos o las riquísimas patatas con jamón. Vete con calma y tomate una caña muy bien tirada mientras te preparan el pincho elegido, porque en muchos casos los montan al momento.
– Zeruko (Pescadería, 10) : son otros grandes expertos en concursos. Bar típico de la parte vieja donde tomar una fantástica anguila ahumada,
una tosta de carabinero o varias creaciones con bacalao.
–Txepetxa (Pescadería, 5): es el templo de la anchoa. ¿Cómo la prefieres, a la jardinera, con huevas de erizo o en crema de centollo? Vamos, una
perdición.
–Ganbara (San Jerónimo, 19): según entras ya huele a setas, su especialidad. Las ponen a la plancha y las puedes acompañar de una selección de vinos de La Rioja alavesa. Disfrutarás también con sus hojaldres y croquetas.
La lista podría continuar con La Espiga, La Viña y tantos y tantos otros que pueblan Donostia.
El caso es que hambre no vais a pasar.